Hoy me apetece compartir con vosotros una serie de reflexiones que intento llevar a cabo y grabar a fuego en mi "ideario de madre" cada día.
Estas convicciones son fruto de mi experiencia como madre (obtuve este importante "título" hace casi catorce años) y como profesora de adolescentes durante once años de mi vida.
También me he basado en las largas y provechosas conversaciones con otros padres y otras madres de mi entorno, en las que nos intentamos animar los unos a los otros y darnos truquitos para desempeñar nuestra tarea lo más dignamente posible en este mundo de locos tan falto de valores fundamentales y tan escaso de lo que se ha llamado toda la vida "educación básica".
No quiero que esto suene a doctrina ni a verdad absoluta; es simplemente MI OPINIÓN PERSONAL. No me considero la mejor madre del mundo; me equivoco 200 veces al día, pero intento aprender de todo lo que me rodea para intentar que mis hijas sean el día de mañana pedazo de mujeronas, que tengan las cosas muy claritas y que vayan pisando fuerte por donde vayan.
(Utilizaré muchas palabras en masculino genérico para facilitar la lectura. Amigas feministas: os ruego no me echéis a lo leones.)
1. RESPETO
Los padres tenemos derecho a ser tratados con respeto por nuestros hijos y por los amigos de nuestros hijos. No debemos permitirles NUNCA la más mínima falta de respeto. Somos sus padres, no sus colegas.
2. HORARIOS
Los horarios deben ser respetados: salidas, comidas, visitas, llamadas telefónicas, descanso, etc. Esto no es un hostal, es una casa de familia.
3. DIVERSIÓN
Los padres no somos monitores de ocio, ni estamos obligados a pasarnos la vida inventando actividades megaguays para que los niños están siempre divertidos. Si es necesario pasar el fin de semana entero encerrados en casa por razones lógicas... NO PASA NADA. Ya se buscarán ellos algo para entretenerse e intentarán agudizar el ingenio, que tampoco les viene mal.
4. PARADERO
No es que tengamos derecho a saber dónde están en todo momento; es nuestra OBLIGACIÓN. Como nos preocupamos por ellos, debemos conocer su paradero en todo momento, incluso hacer determinadas comprobaciones para estar 100% seguros; por ejemplo, llamar a otros padres para ver si es verdad que están allí estudiando, jugando o simplemente viendo una peli.
5. NO
Tenemos que aprender a decir la palabra "NO" sin sentirnos los padres más odiosos del mundo. Es lo que hay.
6. AMISTADES
Deberíamos saber la identidad de los amigos de nuestros hijos, quiénes son, quiénes son sus padres, sus aficiones, entorno, etc. "Dime con quién andas y te diré quién eres."
7. DROGAS
En esto hay que ser implacables: no debemos permitirles que tomen drogas bajo ningún concepto, ni que acudan a lugares donde se puedan consumir, ni con personas que suponemos puedan consumirlas o tener acceso a las mismas. Complicado, ¿verdad? Hoy por hoy, desgraciadamente, están por todos sitios, y en todos los grupos sociales...
8. ERRORES NUESTROS
Estamos en nuestro derecho de equivocarnos y de cambiar de parecer las veces que nos dé la real gana; para eso somos los padres.
9. PREGUNTAS
Podemos hacerles las preguntas que nos parezcan oportunas sobre cualquier tema que les pueda afectar, sea positivo o negativo... Y ESPERAR RESPUESTAS y escucharlas con atención. ¡Hablemos con ellos! Luego no vale quejarse de que no nos cuentan nada.
10. TIEMPO CON ELLOS
Debemos dedicarles tiempo en exclusiva, sin tele, móvil, tablet, ordenador, etc.: un paseo, una charla, una tarde de compras, etc.
11. ADULTOS
Creo que es fundamental que conozcamos bien a los adultos que pueden tener cierta influencia sobre nuestros hijos: profesores, monitores deportivos, orientadores, padres de amigos...
12. AUTORIDAD
No pasa nada, ni se traumatizan los críos, si somos autoritarios cuando veamos que nuestros intentos de explicarles ciertas cosas no los hacen entrar en razón.
13. CARIÑO
Una muestra de cariño es lo que más alimenta el alma de los niños o adolescentes. Nunca sobran los besos, los abrazos, las palabras bonitas... Procuremos que se sientan muy queridos y muy respaldados, que sepan que sus padres están ahí para escucharlos y ayudarles ante cualquier escollo.
14. TAREAS EN CASA
Repito: esto no es un hostal. Aquí todos ensuciamos, todos usamos la ropa y todos comemos; eso quiere decir que la casa es de TODOS, sin excepción, y todos debemos ayudar a mantenerla, cada uno en la medida de sus posibilidades y según su edad. Los padres no son esclavos de los hijos.
15. NECESITAR versus QUERER
"Mami, necesito una sudadera nueva de la marca X".
¿La necesitas en realidad, o simplemente la "quieres"? ¿Tiene que ser de esa marca? ¿Tienes dinero en la hucha para poder pagarla? ¿Te podrías apañar con la que heredaste de tu prima?
¡No les permitamos caer en el borreguismo de las marcas y las modas absurdas! Deben aprender a diferenciar las cosas de buena calidad ante las "moditas caras".
Que no se críen acomplejados por no seguir a rajatabla los dictámenes de la moda, ni los cánones de belleza establecidos por tal o cual programa de televisión, página web o personaje de cine.
16. LO PRIMERO VA ANTES
Tenemos que establecer unas prioridades y que se queden muy claritas:
Deberes del colegio, abuelos, tíos, primos, saludar al llegar a un sitio, respeto por personas mayores/mobiliario urbano/medio ambiente/animales, etc.
17. CONTROL EXHAUSTIVO DE LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS
Antiguamente tenías que ir a los lugares exactos para tener acceso a ciertas "cuestiones peligrosas"; hoy en día todo eso lo tienes al alcance de un solo clic. No tengamos miedo de controlar el uso que hacen de las redes sociales, ni de advertirles de los riesgos que corren si ofrecen información sobre sus vidas privadas en Internet... ¡foto que cuelgues, foto que deja de ser tuya!
18. NO TODO VALE
Repite conmigo: NO TODO VALE. Hoy por hoy, quieren hacernos creer que el fin siempre justifica los medios... ¡PUES NO ES ASÍ! Los "valores éticos tradicionales" están ahí, son universales y válidos en casi cualquier ámbito; y está demostrado que funcionan:
Trabaja mucho y bien - Nadie te regala nada.
Tu felicidad depende de ti mismo - No culpes a nadie de tus desgracias.
Sé responsable de tus propios actos - Toda acción tiene sus consecuencias, buenas o malas.
La verdad tiene un camino - No dejes que pisoteen tu verdad.
Sé honrado - Si algo no es tuyo, no lo toques.
Sé tolerante con los demás, pero no permitas que te hagan comulgar con ruedas de molino.
Sé solidario - Mañana puede que seas tú el que estés en el fondo del pozo.
Intenta hacer de este mundo un lugar más agradable - Sonrisas, por favor, gracias, buenas tardes...
En fin, papás y mamás, esta es mi forma de ver las cosas. Lógicamente, todo esto tiene su grado de flexibilidad y se puede aplicar en según qué casos. Es una pequeñísima aportación desde mi perspectiva subjetiva, lógicamente.
Espero que os haya servido de algo.
¡Hasta la próxima!
No tengo hijos, porque nunca he querido tenerlos, pero estoy totalmente de acuerdo contigo; es de lo peor ver la educación actual de ciertos nenes, que no tienen la culpa de estar criados en el libertinaje más absoluto; una vuelta a los valores tradicionales es lo más aconsejable, dejar el borreguismo como tu dices de las marcas, respetar a los mayores, colaborar en casa, deberes y compromisos... cuántas verdades dices!
ResponderEliminarAsí es, amiga... pero la gente está demasiado ocupada en "sus cosas" como para pararse a educar a sus diablitos. No se dan cuenta de que la vida funciona con más facilidad si en una casa hay límites, horarios, normas y autoridad. Todo fluye y se cansa uno bastante menos. No vale la pena pasarse la vida pegando gritos... no sirven de nada. La norma nº 1 que deberían poner unos padres es esta, aunque suene fea: "Aquí mandan los padres, no los niños".
EliminarYo siento a veces que doy palos de ciego, pero intento educarlas tal y como me educo mi mama; porque estudios ni los minimos pero que sabe de principios!!. REME MARTIN
ResponderEliminarReme, cielo... de eso se trata; no hace falta tener una carrera ni un máster en Economía para inculcar principios básicos. De hecho, a la vista está: la mayoría de nuestros padres no son primos hermanos de Einstein y nos han enseñado lo más importante. Seguiremos en la lucha, que no es fácil :)
ResponderEliminarQuerida amiga ¡cuántas verdades y qué claras!. Me gustaría ver por el ojo de la cerradura a mis hijos dentro de unos años y sueño con haber hecho de ellos unos buenos hombres, maduros y orgullosos de sí mismos. Pero ¡ay, cuántas interferencias del exterior!. Yo siempre digo que si tienes de todo en la mochila (como Dora), sabrás enfrentarte a cualquier situación y salir airoso porque lo cierto es que no podremos acompañarlos en cada vuelta de la vida y tendremos que haberles dado los recursos necesarios. ¿Para ser padres? hay muchos valores tradicionales que me parecen adecuados pero hay también otros modos "no tan tradicionales" que creo que funcionan y en los que hemos evolucionado. Me refiero a algunos aspectos respecto a la diferencia chicos-chicas que aún escucho a mi madre y que creo que están obsoletos, a pesar de ser tradicionales. No obstante, mi máxima es aplicar el sentido común, que es el más común de los sentidos; darles seguridad, sigues estando ahí y eres quién más los quiere a pesar de estar enfadada o de que no hagan lo que te gusta; y tu amor por ellos es infinito y no se acabará nunca porque han nacido de ti y son lo mejor de tu mundo. Peroooooooooo, tu vida, como persona, no se acaba en ellos y tienen que entender que no eres un robot doméstico.
ResponderEliminarPor cierto, ¿el domingo es el día de las virgo blogger?, jajaja, porque estoy escribiendo una nueva entrada para mi blog, TAMBIÉN en domingo. ¿Por qué será?. Cuando la acabe te mando enlace. Muaca.
ResponderEliminar¡Gracias por leerme! Llevas razón en el tema "igualdad"... eso es de cajón; aunque me alegro de haber tenido solo niñas para no encontrarme, sin querer, repitiendo patrones machistas que tanto odié en mi juventud. Besitos :)
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